Algunas rutas de acción para el mejoramiento de la gestión gubernamental entre Ago/21-Ago/22
La encuestadora Invamer, que ha sido criticada por la escasa cobertura muestral de la encuesta del mes de agosto/21, ha registrado el incremento en la desaprobación de la gestión gubernamental del Presidente Duque que, alcanza niveles del 68%.
Con respecto a lo anterior, es preciso manifestar que, si la actual administración quisiera mejorar su imagen, tendría que trabajar sin descanso en este último año en aumentar los niveles de ejecución de inversión en obras de infraestructura que impulsen la recuperación de los niveles de empleo.
Asimismo, tiene que obrar con un verdadero compromiso patrio por frenar la deforestación de la selva colombiana; cumplir con la ejecución de los compromisos presupuestales de los acuerdos de paz y con la economía campesina; mejorar el orden público, la seguridad ciudadana y mostrar resultados reales en las áreas rurales y urbanas; y controlar los precios de la economía (ya que se están saliendo de órbita).
Sobre este último punto, la tasa de interés tiene expectativas de aumento que incrementarían los costos de producción, y el IPC se vería afectado por el alto costo de los insumos importados. Así las cosas, la tasa de cambio sigue incubando fuertes corrientes especulativas que, por la falta de control de la autoridad monetaria han llevado al precio del dólar cerca de los $4.000. Estos, por una parte, han dejado efectos positivos en algunos sectores exportadores formales como petróleo, café y carne; y, en otros no formales, podría estar impulsando el lavado de activos, dado el incremento de las áreas sembradas de cultivos ilícitos y el crecimiento inusitado de la minería ilegal.
De la misma manera, si la rama ejecutiva del poder público actúa de frente al país en este último año de gobierno, con los órganos de control; y se dan a la tarea de disminuir los niveles de corrupción; tendrán en estos consejos un seguro fundamento para mejorar su grado de aceptación con la nación que les confío la administración del patrimonio del Estado y no la titularidad del patrimonio público.
Con todo respeto: a gobernar sin pausa, con efectividad y transparencia para el logro de la recuperación y reactivación económica y social del país.
